Domingo 13 de octubre de 2024
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El Cristo Negro: Joya de devoción que la brisa y el lago trajo a Maracaibo

-La Santa Reliquia o Santo Negro de Maracaibo, es una escultura de Cristo crucificado que para los marabinos representa una…

El Cristo Negro: Joya de devoción que la brisa y el lago trajo a Maracaibo
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-La Santa Reliquia o Santo Negro de Maracaibo, es una escultura de Cristo crucificado que para los marabinos representa una joya de devoción y piedad. Se trata de una talla en madera, realizada en época de la Colonia que perteneció originalmente al poblado de San Antonio de Gibraltar, ubicado al sur del Lago de Maracaibo.

Foto: Cortesía

Después de la destrucción del pueblo ocurrida en el año 1600, por parte de un grupo de indígenas en señal de protesta contra los conquistadores, la imagen del Cristo salió ilesa y fue trasladada a Maracaibo mientras se reconstruía el pueblo.

En esa época Gibraltar fue víctima de uno de los más espantosos saqueos, no propiamente a manos de los piratas, sino de los indios Quiriquires, aguerrida e indómita tribu, de la parcialidad de los motilones que jamás se resignó a la invasión y despojos de sus tierra y mucho menos a la presencia de los españoles en los dominios y querencias de sus mayores.

Foto: Cortesía

Los Quiriquires asolaron varias veces a Gibraltar, pero en la última incursión se destaca en la historia zuliana un hecho de salvajismo excepcional, de donde la Santa Reliquia se salva del incendio del poblado.

El Lago de Maracaibo y la brisa lo hicieron

Construido un nuevo templo, los lugareños de Gibraltar reclamaron a Maracaibo la devolución de su Santo. Los maracaiberos se resistieron a ello dice el cronista Fernando Guerrero Matheus , negándose en reiteradas ocasiones sobre la devolución del “piadoso y sagrado tesoro”.

Para el investigador se formaron dos grupos: los gibralteños y los marabinos, reclamando iguales derechos. La competencia cruza el Atlántico como todas las ventiladas en las capitales de América en solicitud de una solución real.

Según registra la tradición, lo señores del Consejo de Indias “remitieron la solución al mismo Cristo, ordenando que la imagen fuese embarcada cuando soplase el viento hacia Gibraltar, y que el lugar de la costa del Lago a donde llegase el Divino Pasajero, sería el dueño de tan deseado tesoro”.

Las olas del lago y el viento a favor llevaron la embarcación con el retablo hacia la orilla de Maracaibo y desde entonces la reliquia se "hospeda" en nuestra ciudad.

La Catedral es el centro de veneración a esta santa reliquia, popularmente conocida como el Cristo Negro de Gibraltar. Se ubica en una de las iglesias más visitadas por los feligreses, ya que también es el lugar de devoción al Santo Sepulcro, a Nuestra Señora del Carmen y a San Sebastián.

Su fama trascendió hasta España en donde se le erigió un altar en la Catedral del entonces Patriarcado de Indias, en Sevilla, puerto este desde donde zarpaban las naves hacia el Nuevo Mundo y en especial hacia Maracaibo.

Secretaría de Cultura

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